No es un mito: el desayuno es la comida más importante del día. Saltarse el desayuno hace que tu cuerpo empiece el día sin combustible, por lo que tu organismo se vuelva más eficiente energéticamente; es decir, que entre en «modo reserva» y, por lo tanto, retenga más líquidos y más grasas, «por si acaso».
Esta es la razón más clara por la que no debes saltarte el desayuno. Si además tienes una mañana movida o prevés que no vas a poder comer en condiciones en muchas horas, desayunar se vuelve mucho más importante, incluso si vas a hacer ejercicio.
Una investigación realizada por el Colegio Americano de Cardiología y publicada en octubre de 2017 en el Journal of the American College of Cardiology nos da una nueva razón. Según este estudio, saltarse el desayuno se asocia con un mayor riesgo de aterosclerosis; es decir, de endurecimiento y estrechamiento de las arterias debido a la acumulación de placa.
⇒Lee esto también: 3 mitos sobre la importancia del desayuno
Desayuno saludable, corazón sano
Se ha demostrado que tomar un desayuno saludable promueve una mayor salud del corazón, incluido un peso y colesterol más saludables. Aunque estudios previos han relacionado el hecho de omitir el desayuno con el riesgo de enfermedad coronaria, este es el primer estudio que evalúa la asociación entre el desayuno y la presencia de aterosclerosis subclínica.
Los investigadores explican que las personas que omiten regularmente el desayuno probablemente tiene un estilo de vida poco saludable en general. Este estudio proporciona evidencia de que este es un mal hábito que las personas pueden cambiar proactivamente para reducir su riesgo de enfermedad cardíaca.
Investigadores en Madrid examinaron voluntarios de ambos sexos que estaban libres de enfermedad cardiovascular o renal crónica. Se utilizó un cuestionario computarizado para estimar la dieta habitual de los participantes. Los patrones de desayuno se basaron en el porcentaje de la ingesta total de energía diaria consumida en el desayuno. Se identificaron tres grupos:
- aquellos que consumían menos del cinco por ciento de su consumo total de energía por la mañana (se saltaban el desayuno y solo tomaban café, jugo u otras bebidas no alcohólicas)
- los que consumían más del 20 % de su consumo total de energía en la mañana (consumidores del desayuno)
- aquellos que consumían entre el 5 y el 20 % (consumidores de desayuno de bajo consumo de energía)
De los 4.052 participantes, el 2.9 % se saltó el desayuno, el 69.4 % eran consumidores de desayuno de baja energía y el 27.7 % eran consumidores de desayuno.
⇒Lee esto también: 4 motivos para no saltarse el desayuno nunca
Saltarse el desayuno y riesgo de aterosclerosis
La aterosclerosis se observó con mayor frecuencia entre los participantes que omitieron el desayuno; también fue mayor en los participantes que consumieron desayunos de bajo consumo de energía en comparación con los consumidores del desayuno.
Además, los marcadores de riesgo cardiometabólico fueron más prevalentes en aquellos que omitieron el desayuno y los consumidores de desayuno de baja energía en comparación con los que desayunaban. Los participantes que omitieron el desayuno tuvieron la mayor circunferencia de cintura, mayor índice de masa corporal, mayor presión arterial, más lípidos en sangre y mayores niveles de glucosa en ayunas.
Los participantes que omitieron el desayuno tenían más probabilidades de tener un estilo de vida insalubre en general. Eso incluía la mala alimentación general, el consumo frecuente de alcohol y el tabaquismo. También tenían más probabilidades de ser hipertensos y con sobrepeso u obesos. En el caso de la obesidad, los autores del estudio dijeron que la causalidad inversa no puede descartarse. Los resultados observados pueden explicarse por pacientes obesos que saltan el desayuno para perder peso.
«Aparte de la asociación directa con los factores de riesgo cardiovascular, omitir el desayuno podría servir como un marcador de una dieta o estilo de vida poco saludable que a su vez está asociado con el desarrollo y progresión de la aterosclerosis»; explican los investigadores. «Nuestros hallazgos son importantes para los profesionales de la salud y podrían utilizarse como un mensaje simple para las intervenciones basadas en el estilo de vida y las estrategias de salud pública, así como para informar las recomendaciones y directrices dietéticas».
⇒Lee esto también: El ejercicio intenso puede ayudar a reducir los antojos de alimentos poco saludables, según un estudio
Descubre PuntoSeguro Fit
¿Necesitas un empujón más para hacer ejercicio? Desde PuntoSeguro queremos ayudarte a tener una vida más saludable. Contratando tu seguro de vida con PuntoSeguro tienes acceso gratuito a la app PuntoSeguro Fit.
Además de tener controlada tu actividad física diaria, y contribuir a causas sociales, podrás obtener un descuento de hasta 120 € en cada renovación.
Otros artículos de interés
- Cómo reducir la grasa abdominal (o cómo ‘bajar barriga’)
- El ejercicio por sí solo no es suficiente para perder peso
- Así es como el ejercicio mejora la función cerebral en personas obesas y con sobrepeso
- ¿Qué comer antes de hacer ejercicio para perder peso y construir músculo?
- 9 ejercicios para quemar grasa que puedes hacer en el gimnasio