Los seguros de secuestro y extorsión ofrecen una serie de garantías que resultan muy interesantes para personas y empresas que se sientan amenazadas y que quieran asegurar su patrimonio
Muchos ejecutivos y personalidad de las altas esferas viven con miedo a ser secuestrados o extorsionados. Pero no son los únicos. Los «secuestros exprés» (pequeños secuestros y amenazas a cambio de cantidades relativamente pequeñas para agilizar la liberación y el cobro) o los «trucos» para extorsionar de forma rápida pidiendo un rescate a cambio de un supuesto secuestro (que no se llega a producir) aumentan en todo el mundo. No podemos olvidar del riesgo que corren los profesionales y voluntarios que trabajan en zonas conflictivas.
Coberturas de los seguros de secuestro y extorsión
Los seguros de secuestro y extorsión cubre los gastos derivados del secuestro, la extorsión y la detención ilegal con amenaza de daño personal o material. Estos gastos no solo se refieren al rescate, sino a los generados por todo el proceso, incluida la asistencia de mediadores, los gastos médicos, los gastos de defensa jurídica, los transportes, la entrega, las pérdidas patrimoniales del asegurado (incluido su salario), etc.
Estos seguros también ofrecen indemnizaciones en caso de fallecimiento, por incapacidad sobrevenida durante el secuestro e incluso por pérdida de alguna parte del cuerpo durante el proceso.
Pero, ¿lo cubre todo, todo? Sí y no. Los seguros de secuestro y extorsión suelen ofrecer todas las coberturas anteriores, y en algunos casos puede que alguna más, hasta el capital contratado en el seguro. Además, hay que tener en cuenta que los seguros de secuestro y extorsión son, por lo general, seguros de reembolso.
Países con cobertura y sin cobertura
Hay países con más riesgo que otros. Por eso, las coberturas de secuestro, extorsión y detención ilegal pueden suponer el pago de una póliza más alta. Por eso hay que informar a la aseguradora sobre viajes o sobre el lugar donde se va a estar durante la vigencia del seguro. Algunos países suelen estar sujetos a recargo por ser especialmente peligrosos en lo que a secuestros se refiere, como Angola, Burundi, Colombia, Egipto, Etiopía, Honduras, México, Panamá, Senegal o Yemen, entre otros. Es más, algunos países pueden estar excluidos directamente, como Afganistán, Argelia, algunas zonas de Ecuador y México, Iraq, Kenia, Libia, Mali, Pakistán, Filipinas, Siria y Venezuela, entre otros.